Damián Pérez, nacido y formado en el Arse |
Damián Alfredo Pérez cumplió ante River Plate 100 partidos con la camiseta de Arsenal
y el pasado día lunes ante Newell's la Comisión Directiva le entregó una
plaqueta conmemorativa.
El "enano" Pérez, como le dicen cariñosamente sus
compañeros, nació el 22 de diciembre de 1988 en Lanús. Debutó en Primera el 13
de marzo de 2008 a
los 20 años ante Newell's en Rosario, con Gustavo Alfaro como técnico. No fue
un buen partido el de Damián, fue reemplazado en el entretiempo y además
Arsenal cayó 4-1. Paradojas del destino que justo nuevamente ante Newell's,
pero en Sarandí, recibiera el homenaje por haber transitado el camino desde
aquel debut.
No fue todo color de rosa al principio para el "número
15" de Arsenal. Tras ese partido en Rosario no jugó por un tiempo: "fue algo muy lindo, un día
inolvidable. Es lo que todo jugador espera. Es cierto que no nos fue bien, sin
embargo, más allá de eso, uno nunca olvida ese momento". Después de
ese parate y con Daniel Garnero como nuevo técnico, le tocó ser tocó ser
titular ante Boca por el partido de ida de la Recopa: "ese partido también fue inolvidable. Daniel Garnero me puso de
titular, y sí, tampoco tuvimos un buen
partido y encima me tocó marcar a Rodrigo Palacio que estaba pasando un gran
momento futbolístico".
Damián llegó al club en el 2002 con 14 años y edad de de
novena división. Carlos Lema fue quien le tomó la prueba en el Parque Domínico
y en la que finalmente quedó: "no
siempre fui lateral izquierdo, me probé como enganche porque jugaba en ese
puesto en infantiles, un caradura total. Al poco tiempo empecé a jugar como
volante y terminé jugando como lateral izquierdo antes de subir al
Selectivo. En reserva, cuando nos
dirigía el “Pájaro” Domizi, jugué algunos partidos como volante."
Una de las mayores virtudes de Damián fue siempre pelear
lealmente y dejar todo, no solo en la cancha sino en su vida: “cuando empecé nunca pude tener la
continuidad necesaria, mis compañeros me ayudaron mucho cuando no jugaba o me
bajaban al Selectivo." Hubo momentos en donde no lo tuvieron en cuenta
o tuvo alguna posibilidad de ir a jugar a otra parte. Sin embargo la siguió
peleando…"por suerte tengo una
familia bárbara que siempre me habló y me alentó para que no baje los brazos y
mis compañeros, tanto los del plantel de Primera como los del Selectivo, me
decían que siga para adelante y que si me tocaba irme a otro club, tenía que
pelearla como lo venía haciendo. Gracias a Dios me pude quedar y pude lograr
cosas increíbles en el club."
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